Parejas (III)

 

Pareja de tórtola turca (Streptopelia decaocto) "despiojándose". Bentancuria, Fuerteventura.

        Todas las primaveras, las aves se preparan para reproducirse, y con ello perpetuar la especie. En algunas spp, los miembros permanecen emparejados durante todo el ciclo anual, mientras que en la mayoría de los casos, deberán buscar pareja, con métodos muy diversos (enlace I).

Macho de porrón islándico (Bucephala islandica) en actitud de "conquista" ante dos hembras. Lago Mývatn, Islandia.

Pareja de cuchara europeo (Spatula clypeata) alimentándose juntos. Delta del Llobregat, Barcelona.

Pareja de cercetas carretonas (Spatula querquedula) en una parada de su migración prenupcial, posiblemente ya emparejados. Cabo Peñas, Gozón.

        Una vez emparejadas, vendrán los rituales de cortejo, apareamiento y creación de vínculos entre ellos, también muy variados entre spp, familias u órdenes.

Pareja de palomas piquirrojas (Patagioenas flavirostris) despiojándose, una actitud común en aves y mamíferos para afianzar los vínculos de pareja o sociales. Punta Leona, Puntarenas, Costa Rica.

Pareja de grulla coronada cuelligrís (Balearica regulorum). P. N. Aberdare, Kenia.

Pareja de cigüeña común (Ciconia ciconia) en primavera. Llanos de Cáceres.

        Como en anteriores entregas (enlace II), se muestran imágenes de aves y otros animales, siempre emparejadas, bien sea en actitud de cortejo o en otras fases de la vida en pareja, sin ninguna aspiración didáctica o científica.

         

Cópula de una pareja de charrán común (Sterna hirundo), como culminación del cortejo. S'Albufera de Alcudia, Mallorca.

Pareja de cormoranes moñudos (Gulosus aristotelis) nadando al unísono. P. N. de Cabrera, Islas Baleares.

Pareja de ibis eremitas (Geronticus eremita) reforzando vínculos durante la construcción del nido. La Barca de Vejer, Cádiz.

Buitres leonados (Gyps fulvus) en vuelo nupcial, evolucionando al unísono. P. N. de Monfragüe, Cáceres.

Picos picapinos (Dendrocopos major) preparando un nido para comenzar la nidificación. Llanos de la Pez, Gran Canaria. Foto: Charo Fdez. Montaño.

Pareja de loros barranqueros (Cyanoliseus patagonus) en cautividad, realzando los vínculos afectivos. Jardín Botánico de Funchal, Madeira, Portugal.

  

La aratinga cabeciazul (Psittacara acuticaudata) se ha naturalizado en Portugal, formando en la actualidad una población autosuficiente. Jardim da Estrela, Lisboa.

Pareja de alcaudón común (Lanius senator). Granja de Moreruela, Zamora.

Pareja de cuervo grande (Corvus corax), una sp sedentaria, longeva y que suele permanecer con la misma compañía. Gozón, Asturias.

Pareja de urracas (Pica pica). Miranda, Avilés, Asturias.

Dúo de ruidosos cistícolas de Hunter (Cisticola hunteri - Hunter's Cisticola). P. N. Aberdare, Kenia.

Pareja de golondrina común (Hirundo rustica), en la que se nota un ligero dimorfismo sexual. Porto de Espasante, La Coruña.

Los estríldidos suelen establecer relaciones sociales y de pareja intensas, con frecuentes manifestaciones de "afecto"; pareja de estrilda culinegro (Estrilda troglodytes), sp naturalizada en algunas regiones españolas. Barcelona.

Los leones (Panthera leo) suelen celebrar cortas "lunas de miel" cuando una hembra del clan entra en celo; se apartan del grupo varios días. P. N. Masai Mara, Kenia.

El baile se considera en muchas sociedades una forma de establecer o reforzar los vínculos de pareja. Tango. Cala Figuera, Mallorca.

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