martes, 11 de noviembre de 2025

Observaciones en agosto de 2025

 

Brezal florido en el Cabo Peñas, con Calluna vulgaris y Erica cinerea. 17-8-2025.

En el mes de agosto se produce una mezcla en el campo, entre las aves que aún están criando y otras muchas que ya se encuentran en plena migración postnupcial. Las golondrinas comunes (Hirundo rustica), por ejemplo, siguen alimentando pollos en los nidos, pero muchos jóvenes se agrupan en bandos para alimentarse, dormir o simplemente solazarse. Es el caso de un grupo que se instaló en Miranda (Avilés), con el que el día 4 también volaba una golondrina daúrica (Cecropis rufula) y algunos aviones comunes (Delichon urbicum).

Grupo de golondrinas comunes, una típica concentración tras la época de reproducción. Miranda, Avilés. 04-8-2025. 

Golondrina dáurica joven asociada a un grupo de comunes. 04-8-2025.

Grupo de hirundínidos alimentándose de hormigas aladas. Miranda, Avilés.

Golondrina común adulta solazándose con el sol matutino. 05-8-2025.

También los pollos de gorrión común continuaban lanzándose del nido durante el mes, mientras controlamos por el jardín a tres colirrojos tizones (Phoenicurus ochruros) miembros de la segunda camada de la pareja local, y varias familias de jilgueros (Carduelis carduelis) aprendiendo a alimentarse.

Joven colirrojo tizón sobre una planta de Lantana. 17-8-2025.

Jilgueros, adulto y joven del año alimentándose en el prado de un jardín. 09-8-2025.

Paloma torcaz (Columba palumbus) comiendo bayas de saúco (Sambucus nigra). Miranda, Avilés. 12-8-2025.

Un clásico del verano, el mosquito común (Culex pipiens). Avilés. 12-8-2025.

Otro clásico veraniego, la concentración de vehículos en la costa. Verdicio, Gozón. 15-8-2025.

El día 9 vimos un cuco (Cuculus canorus) joven en Podes (Gozón), siguiendo a los adultos que ya estaban en su mayoría en África. Y el día 10 localizamos en la Ría de Avilés un grupo de 10 tarros blancos (Tadorna tadorna), todos jóvenes, descansando.

Joven cuco común en Podes.

Grupo de jóvenes tarros blancos descansando en la ría de Avilés.

Papamoscas cerrojillo con el Pico Gorfolí de fondo. Cabo Peñas. 22-8-2025.

Mosquitero musical joven capturado para anillamiento. Verdicio, Gozón. 15-8-2025.

Infinidad de paseriformes transaharianos comenzaron pronto a verse por la costa y la campiña asturianas, aprovechando que casi todo el mes hubo vientos favorables para la migración. Los más habituales eran el mosquitero musical (Phylloscopus trochilus), la curruca zarcera y los papamoscas cerrojillo (Ficedula hypoleuca) y gris (Muscicapa striata). También se vieron collalbas grises (Oenanthe oenanthe), colirrojos reales (Phoenicurus phoenicurus), varios ruiseñores comunes y no pocas tarabillas norteñas (Saxicola rubetra), como la que anillamos en Verdicio (Gozón) el día 14, e incluso algunos carriceros comunes (Acrocephalus scirpaceus). Ese mismo día localizamos un nido usado de esta última especie, y capturamos un ejemplar.

Papamoscas cerrojillo. 22-8-2025.

Papamoscas gris. Cabo Peñas. 24-8-2025.

Collalba gris en la línea de costa, tras cruzar el Mar Cantábrico. Cabo Peñas. 09-8-2025.

Colirrojo real macho. Cabo Peñas. 24-8-2025.

Joven tarabilla norteña capturada para anillamiento. Verdicio, Gozón. 15-8-2025.

Nido usado de carricero común en el carrizal del Tenrero, Gozón. 15-8-2025.

Con los pájaros pasaron algunas rapaces, como un aguilucho pálido (Circus cyaneus) joven que estuvo varios días por Gozón, y algunos gavilanes (Accipiter nisus) que buscaban migrantes por la línea costera.

Joven aguilucho pálido acosado por una corneja. Cabo Peñas. 22-8-2025.

Gavilán mudando activamente. Cabo Peñas. 24-8-2025.

El paso de limícolas se hizo notorio, aunque sin grandes sedimentaciones. En la Ría de Avilés hubo algunos grupos de chorlitejo grande (Charadrius hiaticula) y correlimos común (Calidris alpina), y por los embalses centrales localizamos algunos andarríos grandes, un chorlitejo chico y alguna agachadiza común.

Chorlitejo grande en la Ría de Avilés. 24-8-2025.

Correlimos tridáctilos descansando en la playa de Arealonga.

El último día del mes nos acercamos a la playa de Arealonga, en Reinante (Lugo) donde Gabi Martín había localizado un correlimos semipalmeado (Calidris pusilla), y junto a él encontramos un buen número de otras limícolas, principalmente correlimos tridáctilos (Calidris alba), comunes y un par de menudos (Calidris minutus).

Correlimos semipalmeado ad. Playa de Arealonga.

Buscando dípteros en el regato de la playa.

Acicalándose junto a un correlimos común y uno menudo.


Descansando brevemente.

Correlimos tridáctilos descansando en la playa.

En el mar comenzó el paso, tímidamente los días de viento poco favorable, con pardelas cenicientas y pichonetas y algunos alcatraces atlánticos (Morus bassanus). A finales de mes entró un frente atlántico, que provocó el paso cercano a la costa de las aves que suelen hacerlo mar adentro y más al oeste. Contamos desde la Punta de la Vaca (Gozón)  buenas cifras de pardelas pichonetas, cenicientas atlánticas y sombrías, e incluso algunos paiños europeos y de Wilson. Los págalos no fueron numerosos, pero si variados, igual que los charranes, más abundantes que en otras temporadas.

Joven alcatraz atlántico acosado por una gaviota. Punta de la Vaca, Gozón. 30-8-2025.

Arcoiris sobre el mar, tras un chubasco. Punta de la Vaca. 31-8-2025.

El día 31, en una tarde para recordar (con Dani, Pajuelo, Nacho y Guillermo), además de números importantes, como por ejemplo unas 2500 pardelas pichonetas, casi 1000 charranes de varias spp, o unas 35 gaviotas de Sabine, registramos algunas cosas interesantes. Nada más llegar, vi pasar una pardela chica (Puffinus baroli), no lejos de la costa; hacia las 19 horas, Dani identificó dos charranes rosados adultos, guiando a un grupo de otros charranes; al poco vieron llegar un halcón del mar, que identificamos como de Eleonora (Falco eleonorae) al llegar a nuestra altura, un inmaduro de morfo claro. Por último, a las 19:30 localicé un petrel algo lejos, volando entre pichonetas, que Dani consiguió grabar testimonialmente, identificándolo como petrel freira o de Madeira (Pterodroma madeira), por el vuelo, tamaño y coloración bajo las alas.

Halcón de Eleonora inmaduro entrando del mar.

Petrel de tipo Madeira o freira en vista ventral, frente a la Punta de la Vaca. Foto de Daniel López Velasco, sacada de un video.

Págalo parásito (Stercorarius parasiticus) acosando a un grupo mixto de charranes, con patinegros y comunes, frente a la Punta de la Vaca.

Págalos parásitos en migración hacia el oeste sobre el mar. 31-8-2025.







sábado, 1 de noviembre de 2025

La India, febrero de 2025 (I): Delhi y Ranthambhore

 

Amanecer en el vuelo de Doha a Delhi.

El pasado febrero realizamos un viaje a La India, con el objetivo principal de ver tigres (Panthera tigris) en el Parque Nacional Ranthambhore, en Rajasthan, aunque también para ver aves en otras zonas cercanas y algunas de las joyas arquitectónicas que conserva el país. El viaje fue organizado por Daniel López Velasco (de Ornis Birding Expeditions), que actuaba como guía del grupo, todos conocidos, y de la organización local se encargó Camilla Malvestiti.

Calle Dariba Kalan, en el barrio Chandni Chowk, en el NE de Delhi.

Ardilla de palma septentrional (Funambulus pennantii), sp muy común en Delhi y en casi toda la India. Lodhi Garden, Delhi.

Volamos los días 2 y 3 de febrero, con escala en Doha (Qatar), y el día 3 lo pasamos en Delhi. Visitamos varios lugares del NE de la ciudad, el Fuerte Rojo, Jawa Masjid y alguna mezquita y mercado de la zona.

Miná común (Acridotheres tristis - Common Myna), una de las aves más comunes en el país.

Shish Gumbed, Lodhi Garden, Delhi.

Bulbul cafre (Pycnonotus cafer - Red-vented Bulbul) en el Lodhi Garden.

Para ir conociendo las aves del país, paseamos por el Lodhi Garden, en Nueva Delhi, donde se ubican varias tumbas monumentales y alguna mezquita. En este parque ya registramos unas pocas especies de aves que veríamos a lo largo del viaje.

Ánade picopinto indio (Anas poecilorhyncha - Indian Spot-billed Duck).

Vinago patigualdo (Treron phoenicopterus - Yellow-footed Green-pigeon), una paloma frecuente en parques y jardines.

Ibis verrugoso (Pseudibis papillosa - Red-naped Ibis). Vimos dos en el parque.

Milano negro (Milvus migrans - Black Kite) de la ssp govinda, el servicio de limpieza del país.

Cuervo indio (Corvus splendens - House Crow).

Turdoide matorralero (Turdoides striata - Jungle Babbler), sp sociable que suele moverse en grupos.

De noche nos reunimos con el resto de los componentes del grupo, y al día siguiente partimos hacia Ranthambhore, el Parque más conocido para la observación de tigres, llegando al mediodía al Hotel Aangan, en las inmediaciones del espacio protegido.

Uno de los diversos carteles que decoran las entradas al parque de Ranthambhore, y algunos langures.

Grupo de nilgos ó nilgais, un antílope frecuente en algunas zonas del parque. Foto: Charo F. Montaño.

Grupo de axis o chitales, entre la neblina del amanecer. Es un cérvido abundante, y una de las presas más frecuentes del tigre.

Esa misma tarde realizamos el primero de los seis safaris de cuatro horas programados, unos desde el amanecer y otros de tarde hasta el anochecer. Nada más entrar en el parque comienzan a verse animales, tanto aves como mamíferos, siendo estos últimos, en su mayoría, presas posibles para los tigres. Abundan los cérvidos como el axis (Axis axis – Chital) y el sambar (Rusa unicolor), y antílopes como el nilgo (Boselaphus tragocamelus – Nilgai), y vimos algunas gacelas indias (Gazella bennetii) e incluso jabalíes (Sus scrofa – Eurasian Wild Pig) .

Macho de axis.

Macho de sambar, otra de las presas habituales de los tigres; su sonido de alarma sirve a menudo para delatar la presencia del carnívoro.

Macho de sambar en la orilla de un lago, un buen posadero para una garcilla india.

Hembra y cría de nilgo.


Gacela india en una planicie del parque.

Jabalí buscando comida.

En varias ocasiones, los meloncillos rojos (Herpestes smithii – Ruddy Mongoose) se cruzaron con nuestros coches, ignorándonos, y también encontramos alguna agrupación de zorros voladores de la India (Pteropus medius – Indian Flying Fox). Pero los mamíferos más frecuentes eran los langures de Jánuman (Semnopithecus entellus – Bengal Sacred Langur), sobre todo en las proximidades de los edificios y carreteras.

Meloncillo rojo patrullando en busca de presas.


Dormidero de zorros voladores, cerca de una de las entradas al parque. Foto: Charo F. Montaño.

Langur descansando al mediodía.

Langur adulto. Foto: Charo Fdez. Montaño.

En los dos primeros safaris no vimos tigres, pero disfrutamos con la observación sosegada de aves y mamíferos, en ellos y en el tercero tuvimos la ventaja de que solo entraron nuestros dos vehículos en el parque, cerrado dos días al público.

Templo en ruinas en el que han criado en varias ocasiones los tigres.

Macho joven caminando hacia una ensenada del lago donde pastaban varios sambares.

Con la mirada fija en los ciervos.

Cuando acechan, no dejan de mirar a las posibles presas, aunque encuentren un vehículo casi en su  línea de paso. Foto: Charo Fdez. Montaño.

Finalmente, en la tercera salida, vespertina, los guías localizaron junto a un lago a la hembra más conocida, con sus tres crías de más de un año ya casi emancipadas, dos hembras y un macho. Pronto comenzaron las voces y los nervios de guías y conductores, algo habitual, porque el joven macho se dirigía hacia un grupo de sambares que pastaban en una orilla.

Grupo de sambares hacia los que se dirigía el joven macho.


En pleno acecho.

Lo interceptamos antes de llegar a ellos, y disfrutamos con un acecho lento, que aunque no acabó en ataque, si nos puso tensos, al ver venir al tigre directo a nuestra posición.

Descansando tras descartar el ataque, aunque seguía mirando a las posibles presas. Foto: Charo F. Montaño.

Mostrando su poderío.

Oso bezudo buscando alimento al amanecer. Foto sacada con un teléfono.

Cuando ya volvíamos, comentando la estupenda observación, y casi anocheciendo, vimos un par de osos bezudos (Melursus ursinus – Sloth Bear), que redondearon la jornada. Al día siguiente vimos otro oso en mejores condiciones, temprano, y por la tarde contemplamos a otra familia felina, cerca de un antiguo templo en el que alguna vez ha parido una tigresa.



Oso bezudo campeando en busca de alimento.

Tigre descansando sin prestar atención a los turistas.

Joven tigre acercándose al resto de la familia, para lo cual no duda en pasar entre vehículos de observadores. Foto: Charo F. Montaño.


Joven tigre caminando junto a un vehículo de observadores.

El último día, muy cerca del fuerte de Ramthambhore seguimos un buen rato a un macho veterano, que se ocupaba en marcar su territorio mientras se desplazaba al paso, y que al final nos dirigió una mirada inquisitoria.

Macho adulto caminando por el bosque de Ranthambore, cerca del Fuerte.

Marcando su territorio. Foto: Charo Fdez. Montaño.

Una mirada de despedida.

Con posterioridad, en verano, nos enteramos de que las dos hembras de la familia de tigres que observamos protagonizaron sendos ataques mortales a un guarda y un monje, ambos dentro del parque, que hubo otro a un niño cerca de un templo, realizado por un tigre sin identificar.