Observaciones en abril de 2020

Panorámica de Miranda al atardecer del día 19.

Las observaciones del mes de abril, al completo, se realizaron desde la casa en la que pasamos la reclusión, en Miranda (Avilés). Aunque hubo numerosos registros de aves en migración, la mayor parte fueron observaciones de las aves comunes (anotamos en este mes unas 60 spp), a las que habitualmente hacemos poco caso, e indagamos un poco en sus costumbres. A pesar de nuestro encierro, la primavera siguió su curso, sin esperarnos.

Observando desde casa.

Carbonero común y colirrojo tizón.

Colirrojo tizón macho. Día 12.

Flores de cardo (Cirsium sp) en un prado de Miranda. Día 4.

Por llevar un orden, comentaré algunas de las spp por el taxonómico. Todos los días se vieron palomas torcaces (Columba palumbus) y tórtolas turcas, ambas numerosas. El primer registro de vencejo común (Apus apus) fue el dia 19, cuando vi tres ejs volando sobre San Cristobal; el día 23 ya se vió uno en Miranda, cuatro al día siguiente por la mañana, y ya se hizo habitual hasta el 30, cuando eran al menos seis los presentes.

Pareja de paloma torcaz en un árbol en flor. Día 7.

Vencejo común. Día 30.

Una observación notable fue la de 15 cigüeñas blancas (Ciconia ciconia), volando juntas hacia el E el día 17; también vimos una garza real en migración el 15. Notable fue también la presencia de alcatraces atlánticos (Morus bassanus) en la costa, igual que en marzo, con cientos de ejs volando sobre Salinas con viento NE fuerte el día 3, y con paso numeroso al día siguiente.

Foto testimonial de los numerosos alcatraces que volaban sobre la costa el día 3.

Foto testimonial del águila pescadora registrada el día 5 volando hacia el E.

El primer autillo cantó el día 13, y ya no dejó de hacerlo el resto del mes; también oímos lechuza común y mochuelo. El día 5 me avisó Dani (desde Salinas) de la llegada de un águila pescadora (Pandion haliaetus) desde el O, que pude ver a la altura de Coto Carcedo (esta práctica de ver las mismas aves desde diferentes domicilios la repetimos varias veces). Todos los días se vieron busardo ratonero (Buteo buteo) y milano negro (Milvus migrans), a veces en números altos, y el día 9 pasó un milano real hacia el O (de nuevo avisado por Dani). Vimos algún gavilán (Accipiter nisus) casi todos los días, bien volando alto cerca de la costa o, en ocasiones, muy cerca buscando presas, y azor (Accipiter gentilis) en más de 10 ocasiones, incluso transportando una presa al nido. El día 28, un alimoche común (Neophron percnopterus) nos sobrevuela y se va hacia el NO, posiblemente el mismo que había sido visto desde Salinas unos días antes. Para terminar con las rapaces, citaremos la visita en varias ocasiones de halcón peregrino, cernícalo vulgar y alcotán (el primero el día 14).

Los milanos negros son acosados a menudo por paseriformes, en este caso una corneja.

Gavilán sobrevolando huertas. Día 21.

Azor común. Día 27.

Alimoche ad prospectando la campiña interior.

Por los alrededores se ven muchos paseriformes, tanto sedentarios como estivales o de paso. Vemos cuervo grande (Corvus corax) de contínuo, con un máximo de ocho juntos. Los carboneros comunes (Parus major) siguen acudiendo a los comederos, aunque casi no los cebamos ya, pero lo hacen en pareja o en solitario. También aparece un par de días una pareja de herrerillo común (Cyanistes caeruleus), sp más escasa en la zona.

Cuervo grande en la cruz de la iglesia de Miranda. Día 15.

Carbonero común hembra alimentándose en un comedero.

Herrerillo común capturado para anillamiento.

        Las golondrinas comunes (Hirundo rustica) van llegando los primeros días del mes, aunque hasta la segunda decena no se ven establecidas las que crían en la comarca, y además, veo pasar ejs solos o en pequeños grupos hacia el E, los días 15, 18, 19 y 21. En paso vemos aviones zapadores en varias jornadas entre el 14 y el 25, y otros hirundínidos esporádicamente: una pareja de golondrina daúrica los días 5 y 27, dos aviones roqueros el 27 y un grupo de avión común el 30. Otros migrantes sedimentan en algunas jornadas, así, vimos varios mosquiteros musicales el día 1, y una curruca mosquitera (Sylvia borin) el día 25, que al día siguiente ya conocía una fuente alimenticia que utilizan las currucas capirotadas (Sylvia atricapilla) locales, el néctar de un arbusto ornamental del género Callistemon. El día 24, con niebla en la costa, apareció temprano un macho de collalba gris (Oenanthe oenanthe), descansando en un tejado cercano.

Una de las primeras golondrinas comunes que llegaron, el día 4.

Pareja de golondrina común. Día 19.

Curruca capirotada hembra alimentándose de néctar. Día 26.

Curruca mosquitera alimentándose de néctar. Día 26.

Collalba gris macho.

Los estorninos negros (Sturnus unicolor) locales comenzaron pronto a criar, y en la última semana del mes ya estaban todos cebando bajo las tejas, aunque algunos eclosionaron el día 26. Otros que crían pronto son los mirlos comunes (Turdus merula), que también marcaban el territorio cantando; igual le ocurre al petirrojo (Erithacus rubecula), que cantaba todos los días, con sol o con lluvia.

Huevo recién eclosionado de estornino negro. Día 26.

Estornino negro entrando a cebar al nido en un tejado. Día 28.

Estornino negro sacando un saco fecal del nido. Día 28.

Mirlo común cantando con orballo. Día 27.

Petirrojo capturado para anillamiento. Día 8. Foto: Charo Fdez. Montaño.

Petirrojo anillado (el de la foto anterior) cantando tras un chubasco. Día 10.

Los colirrojos tizones (Phoenicurus ochruros) nos entretuvieron bastante con sus disputas, pues en el borde de dos territorios, los dos machos se retaban de continuo hasta mediados de mes, llegando en ocasiones “a las manos”. Por su parte, un macho de colirrojo real (Phoenicurus phoenicurus) estuvo cantando desde su llegada, el día 6, aunque no vimos a ninguna hembra hasta los primeros días de mayo.

Colirrojo tizón macho buscando presas. Día 26.

Dos machos de colirrojo tizón desafiándose en el borde de sus territorios.

Disputando el espacio.

Colirrojo real capturado para anillamiento. Día 27. Foto: Charo Fdez. Montaño.

Colirrojo real. Día 28.

Nos acompañaron algunas spp más, como la lavandera blanca (Motacilla alba), el gorrión común, y varias de fringílidos, como el serín verdecillo (Serinus serinus), el verderón común (Chloris chloris) o el jilguero, que ya alimentaba pollos fuera del nido el día 29.

Lavandera blanca en el tejado de un hórreo. Día 14.

Macho de verderón común sobre un espino blanco.

Macho de serín verdecillo.

Otros pequeños animales aparecieron en este mes de encierro, entre ellos abejas, abejorros, avispas y mariposas. La lagartija roquera (Podarcis muralis) nos mostró sus posibilidades de alimentación, tragando lombrices de tierra y caracoles, algo que también hace el erizo común (Erinaceus europaeus). Por último, como curiosidad, nos queda la observación en tres ocasiones de delfines mulares, en el trocito de mar que alcanzamos a ver con el telescopio.

Hembra de lagartija roquera comiendo una lombriz de tierra, que antes disputó a otro ejemplar. Día 7.

Macho de lagartija roquera tras haberse tragado al dueño de la cáscara. Día 21.

Erizo común hecho una bola como defensa.

Mariposa de la sp Pararge aegeria. Día 26.

.