La Cabra Bermeya asturiana

Aunque las referencias en Asturias al ganado cabrío vienen de antiguo, hasta recientemente no se hace referencia a sus características, aunque era un ganado claramente diferente al que se comenzó a introducir en la región a mediados del siglo XX. Esta cabra autóctona habría sido explotada desde al menos la época prerromana, pues hay restos óseos de la sp en el yacimiento del castro de la Campa Torres, en Gijón.

Valledor, Allande.

Macho cabrío; Cabral, Allande.

Puerto del Palo, Allande.

Parece que en el siglo XX la cabra bermeya era abundante, con un censo superior a los 100.000 ejs en 1938, pero los cultivos forestales y la citada importación de otras razas, casi la hicieron desaparecer.

Rebaño en Villanueva, Valledor (Allande).

Es una cabra de color castaño o rojo, con varias tonalidades, y no puede presentar ninguna mancha de otro color. Los cuernos tienen forma de arco, con las puntas hacia arriba en algunos ejs. La alzada no llega a los 80 cm en los machos, ni a los 75 en las hembras, y el peso es de 65-70 kg en los machos y 45-50 en las hembras.

Villanueva, Valledor (Allande).

En 1998 se creó la Asociación de Criadores de la Cabra Bermeya (ACRIBER). Desde entonces, además de crear y mantener el Libro Genealógico de la raza, se dedicó a la búsqueda de ejs dispersos por la geografía astur. Sus últimos núcleos de importancia estaban en el Occidente, principalmente en Allande, y en los Picos de Europa.

Rebaño pastando en Valledor, Allande.

Picos de Europa, Macizo Occidental desde Los Pallares, Següenco (Cangas de Onís).

Villanueva, Allande.

La carne de buena calidad y la leche para hacer queso son los principales recursos de la raza para salir adelante, algo que parece factible viendo el aumento progresivo de criadores y rebaños.

Villanueva, Allande.

Los Pallares, Següenco (Cangas de Onís).

Puerto del Palo, Allande.

Más información:

Álvarez Sevilla, Antón (2001). Les Races Autóctones del Principau d’Asturies. Fundación Belenos.