lunes, 6 de julio de 2020

Costa Rica (II): Tortuguero y Cerro de la Muerte


Macho de quetzal guatemalteco. Cerro de la Muerte, Cordillera de Talamanca.
Visitamos la playa de Tortuguero solamente de día, puesto que no era la época de desove de las tortugas marinas y allí localizamos algunas aves marinas, tales como el rabihorcado magnífico, el pelícano pardo y el charrán real americano (Thalasseus maximus). En el pueblo y alrededores también vimos algunas aves, en la vegetación de parques y jardines, habituadas a la presencia humana.
Playa de Tortuguero.

Charrán real americano. Playa de Tortuguero.

Rabihorcado magnífico (Fregata magnificens) persiguiendo a un charrán real americano. Playa de Tortuguero.

Carteles en el pueblo de Tortuguero.


Ej de paloma colorada (Patagioenas cayennensis - Pale-vented Pigeon) en un parque del pueblo de Tortuguero.

Tucán pechigualdo (Ramphastos ambiguus - Black-mandibled Toucan) en Tortuguero.

Tucán pechigualdo. Foto: Charo F. Montaño.

Ej de pibí oriental (Contopus virens - Eastern Wood-Pewee), sp frecuente en paso e invernante escaso. Tortuguero.


El recorrido en lancha por las orillas de los canales fue bastante productivo, con buenas observaciones de iguanas verdes (Iguana iguana)  y basiliscos verdes (Basiliscus plumifrons), además de algún cocodrilo americano (Crocodylus acutus). 


Embarcaderos en el canal principal, cerca de Tortuguero.

Macho de iguana verde tomando el sol junto al canal principal.

Hembra de iguana verde.


Hembra de basilisco verde camuflada entre la vegetación.

Macho de basilisco verde.


Ej de cocodrilo americano soleándose en un embarcadero abandonado.
  
Hembra de mono araña (Ateles geoffroy), con su cría en la espalda, saltando entre dos árboles para superar un caño.

La misma hembra de mono araña una vez superado el obstáculo.

Las aves acuáticas también se dejaron ver, en forma de ardeidas, martines pescadores, anhingas americanas (Anhinga anhinga) y jacana centroamericana (Jacana spinosa), y sobre la selva vimos volar algunas golondrinas y vencejos.

Selva en las orillas de un caño estrecho.

Águila pescadora (Pandion haliaetus - Osprey) descansando en un árbol junto al canal principal.

Ad de garcita verdosa (Butorides striata virescens - Green Heron) descansando en una orilla.

Garcita verdosa. Foto: Charo F. Montaño.

Macho de martín pescador amazónico (Chloroceryle amazona - Amazon Kingfisher) apostado en una rama sobre el agua. Foto: Charo Fdez. Montaño.

Anhinga americana (Anhinga anhinga) en una rama sobre el canal.

Ej de jacana centroamericana (Jacana spinosa - Northern Jacana) caminando sobre un rodal de vegetación flotante en el que se situaba su nido. Foto: Charo Fdez. Montaño.


Orilla del canal principal desde el barco.

El día 22, tras dejar Tortuguero, recogimos el coche de alquiler y nos dirigimos hacia el Cerro de la Muerte, en la Cordillera de Talamanca. Nos alojamos dos noches en el Paraíso Quetzal Lodge, a más de 2700 m de altitud, al que llegamos de noche tras estar parados tres horas por la caída de un árbol en la carretera. Las noches son aquí frías, y la temperatura bajó hasta los 5º C, un fuerte contraste con el lugar de donde veníamos.


Hábitat de selva montana en el que vive el quetzal.

Mosquero cabecinegro (Empidonax atriceps - Black-capped Flycatcher) en la copa de un árbol.


Tucanete gorgiazul (Aulacorhynchus caeruleogularis - Blue-throated Toucanet) comiendo bayas.
Capulinero colilargo (Ptilogonys caudatus - Long-tailed Silky-flycatcher), sp frecuente en zonas altas de la cordillera.

Capulinero colilargo.


A la mañana siguiente, aún no pudimos disfrutar de la belleza del lugar, puesto que aún de noche, y tras un ligero desayuno, salimos a buscar a la joya del lugar, el quetzal guatemalteco (Pharomachrus mocinno, Resplendent Quetzal). Con el guía del hotel, en un grupo pequeño, realizamos una espera en uno de los puntos habituales que visita la sp. Aunque en ese lugar no apareció el quetzal, si lo hicieron otras pequeñas aves nuevas para nosotros. Nos trasladamos a otro lugar donde hay algunos aguacatillos, de cuyos frutos se alimenta, y al poco, el guía nos avisó de la localización de un ejemplar. Pudimos observar, comiendo en el mismo árbol a un par de hembras, un macho joven y, finalmente, un macho adulto que durante unos segundos posó al descubierto para los fotógrafos.

Esperando al quetzal.

Hembra de quetzal guatemalteco.

Macho joven.

Macho ad. Foto: Charo Fdez. Montaño.



Con los deberes hechos, fuimos a por el desayuno de verdad, y a disfrutar de los jardines del lodge. Por la tarde nos acercamos a la zona más alta del Cerro, a unos 3400 m, buscando el junco de los volcanes (Junco vulcani, Volcano Junco), sp alpina, igual que el colibrí volcanero (Selasphorus flammula, Volcano Hummingbird); los machos de colibrí se mantienen en esta época del año en altura, mientras que las hembras viven a menor altitud (vimos varias en el hotel). Además, durante la subida, un coyote (Canis latrans), se paseó junto a la pista con absoluta tranquilidad.



Varios ejs de junco de los volcanes.

Macho de colibrí volcanero.



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